Esta frase la hemos oido muchísimas veces, pero es que es tan cierta..
Ultimamente me he habituado a ir a comer a casa al mediodia. No tengo mucho tiempo, pero si el suficiente para llegar, comer, tomar cafe o infusión y salir corriendo. Ya sé que eso me supone el que no pueda estar haciendo la sobremesa mucho rato, como podría hacerlo si me quedara a comer cerca de la oficina, pero me compensa muy gratamente el llevar este ritmo.
Eso lo puedo hacer, porque o bien me he dejado la noche anterior la comida preparada, o porque mi "chef" tiene un trabajo y horario que le permite trabajar bastantes horas en casa. Eso es una suerte porque de esta manera comemos juntos cada día. Mi casa es como un restaurante, cada uno tiene un horario distinto, y entramos y salimos a distintas horas; cuando yo me voy llega mi hijo y al cabo de un rato mi hija, que también come y se vuelve a ir, porque tiene prácticas por las tardes. Los martes y jueves mi hijo no viene a comer a casa porque a la tarde tiene futbol o clase, y no le da tiempo a venir.
En fin que para mi es una delicia el comer los dos solos, tranquilos, porque así todos bien, nos vemos lo suficiente pero sin estar a cada momento discutiendo quien pone la mesa, quien la quita. Cada uno se pone y quita lo suyo.
Para cenar si coincidimos juntos, para tener tiempo de hablar de como ha ido el dia, reflexiones sobre la jornada, de reir, de discutir quien pone la mesa y quien la quita....
Y la verdad como en casa en ningún sitio......
Només de poder treure't les sabates ja és un plaer i si tens la sort de compartir taula amb la parella sense nens, es extraordinari.
ResponderEliminarT'haig de dir que compartim experiència, que tens tota la raó i que t'ho diu un que havia anat molt al típic menú de migdia.
Sí, tienes razón....yo odio comer sola, lo odio con todas mis fuerzas, aunque sea en casa. Es algo que no puedo,pero bueno, hay días en los que no me queda más remedio. Parece que no, pero el hecho de comer juntos, tu chef y tú os va genial.
ResponderEliminarUn petó ben fort preciosa!!
Doncs jo menjo a la feina i m'agrada fer-ho perquè tenim la sort de tenir una cuinera excelent. Una part del meu horari de treball em coincideix al migdia així és que m'és impossible anar a dinar a casa.
ResponderEliminarEsto lo decía nuestro padre, y lo decía con mucho sentimiento, y es tan cierto.
ResponderEliminarA veces podríamos ir aqui o alla, pero es que entre semana casi no paro en casa, me voy antes de las ocho y vuelvo a las siete de la tarde, por lo que cuando llega el finde, ME APETECE ESTAR EN CASA... ya que como en casa en ningún sitio.
Lo mas importante es la compañía, tener un ambiente agradable, estar bien con tu pareja, y los hijos siempre estan un poco revueltos, pero bueno eso es normal... son pequeños... pero que BIEN SE ESTA EN CASA CUANDO SE ESTA BIEN!!!
Y claro, creo que despues de estos meses de tener las obras en casa, ahora para vosotros debe ser un lujo el poder disfrutarlo, y no sabes cuanto me alegro, te lo mereces todo estimada germana!!!
Besitos guapa, y también para tu husband.
Gran verdad!
ResponderEliminare echo si no viene nádie a comer, me da pereza hasta cozinar solo para mí.Termino comiendo de bocata.
Besitos
Pues qie siga usted, ciudadana, con esta sana costumbre a pesar de los sacrificios que te supone. Y es que uno, que durante muchos años tenía que comer también fuera de casa, terminó odiando la chuleta de cerdo porque,por mucho que se quiera, comer fuera de casa termina aburriéndote.
ResponderEliminarY si encima el husband es el maitre, ¿cómo le vas a hacer ese feo? jaja
Un beso, ciudadana.
qué razón tienes,en mi casa durante 7 meses para comer no nos vemos, pero intento mantener la cena como momento de estar todos juntos, ahora tengo 5 meses para disfrutar de mi casa al completo tanto comidas como cenas... me gusta ese momento en que se comparten como bien dices risas y porqué no... hasta pequeñas riñas!!
ResponderEliminarUn besito
Mmmm cuánta razón tienes, a mi me encanta comer en casa. Pero mi hija come en el cole, así no tengo esa "presión" de preparar la comida completa...es mi ratito de relax al mediodía, para comer tranquilamente y a les 16.30 ir a buscar a mi hija. Si lo haces con tu pareja, más que mejor. Me ha gustado esa visión familiar , además con cocina nueva , seguro que es más atractiva si cabe. Un abrazo!
ResponderEliminarPensé que me había pasado ya por aqui, y veo que no ¡¡menudo despiste!!!
ResponderEliminarYo también odio comer sola, de hecho cuando me toca, muchas veces ni como.
Un besote!!
Es una suerte el poder comer en casa y no siempre de táper o dejándote la pasta en restaurantes, aunque en mi caso lo segundo es de pascuas a ramos, soy más de táper.
ResponderEliminarY que lo digas guapa. Hace muchos años y siempre que podemos comemos todos en casa, bueno los mayores no porque ya tienen su propio hogar, pero es estupendo almorzar en la mesa de la cocina cerca del fogón, calentitos GUAUUUUUUU.
ResponderEliminarBesitos guapa